Tortosa, la joya monumental del Ebro
Una ciudad entre historia, naturaleza y cultura
Descubrir Tortosa es adentrarse en más de 2.000 años de historia, donde cada rincón habla de las civilizaciones que han dejado su huella. Desde su imponente castillo de la Suda hasta la catedral de Santa María, pasando por el barrio judío y los Reales Colegios, la ciudad ofrece un viaje fascinante en el tiempo.
Un patrimonio que cautiva
El Castillo de la Suda, de origen andalusí, corona la ciudad y ofrece vistas espectaculares del río Ebro y de las montañas de Els Ports. A sus pies, el casco antiguo despliega calles empedradas, palacios renacentistas y edificios modernistas que narran la riqueza cultural de Tortosa.
Fiestas con alma
La Fiesta del Renacimiento, celebrada en julio, transforma la ciudad en un escenario del siglo XVI, con mercados, espectáculos y ciudadanos vestidos de época. Es una experiencia inmersiva que transporta a los visitantes al esplendor renacentista de Tortosa.
Entorno natural privilegiado
Entre el Parque Natural de Els Ports y el Delta del Ebro, Tortosa es un punto de partida ideal para los amantes de la naturaleza. Rutas de senderismo, observación de aves y actividades fluviales son solo algunas de las propuestas de este entorno único.
Gastronomía con identidad
La cocina tortosina combina los sabores del mar y de la huerta, con platos como la anguila en su salsa o el arroz con pato. Los mercados locales y los restaurantes tradicionales permiten degustar la autenticidad de los productos de la tierra.
Cómo llegar
Tortosa está bien conectada por carretera y ferrocarril, con fácil acceso desde Barcelona y Valencia. Es un destino perfecto para una escapada cultural y natural inolvidable.